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La Página de Bedri
Relatos prohibidos
Carlos y la esposa de su primo
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Mi nombre es Carlos y este es mi relato.

Tengo un primo con el que me crié desde niños, en la adolescencia nos llevábamos muy bien. Se llama José y tenía 24 años en aquel entonces, y yo tenía 23. Salíamos a todas partes, un día, en mi fiesta de cumpleaños, llevó una chica que parecía ser un pasatiempo para él, la chica era muy bonita, estatura media, cabello negro, de piel blanca, ojos café claros, tenía los senos redonditos y no tan grandes, tenía una cadera más o menos ancha y unas nalgas paraditas muy lindas, tenía 20 años en ese momento y su nombre es Johanna. El caso es que desde ese día quedó flechado con la que es ahora su esposa. Pasó el tiempo y ella quedó embarazada y dio a luz. Yo me la llevaba muy bien con los dos que se fueron a vivir juntos cerca de mi casa. Cuando el niño cumplió dos años, el hizo una reunión y me invitó. Fui y la pasamos bien, bebimos cerveza pero yo no quise tomar tanto como él.

Esa misma noche ocurrió algo que no me esperaba, todos los invitados se fueron y mi primo José ya estaba muy embriagado. Yo ayudé a Johana a guardar los equipos de sonido y todo lo demás. Lo acostamos en la cama como pudimos eran aproximadamente las 2 de la mañana y José quedo del todo dormido, y el niño de ellos estaba durmiendo en su cuarto.

Debo mencionar que ella no tomó mucho alcohol, solo dos copas. Al terminar de ayudarla me dispuse a marcharme, en ese momento me dice― ¿Carlos ya te vas? ―ella tenía un pijama para dormir y se veía que no tenía sostén y tampoco panty" 

― Si, ya es un poco tarde y tienen que descansar ―dije mientras pensaba dentro de mí―que deliciosas nalgas se le ven, y que decir de sus senos.

― Antes de que te vayas, necesito un favor tuyo ―dijo Johanna.

― ¿En qué te puedo ayudar? ―dije mientras pensaba para mis adentros―¿Será que me la quiere chupar aquí?―Eso sería una fantasía con mucha adrenalina y cabe mencionar que José me había comentado que Johanna era la mejor mamadora que había tenido y yo tenía mucha curiosidad.

― Ayúdame a llevar estas canastas  de cervezas al patio, José se levanta tarde y no quiero tener esto sucio.

― Está bien, con gusto ―dije sintiéndome decepcionado por dentro.

En ese momento, ella cierra la puerta principal de su casa y luego entra a ver al niño en su cuarto, sale del cuarto del niño y echa un vistazo al cuarto donde duerme mi primo, y cierra la puerta con mucho cuidado.

Cuando yo regresaba del patio y ella me dice― Gracias, quieres orinar antes de irse, entra al baño porque ya me iré a dormir.

Aproveché y entré al baño y me dispuse a orinar, cuando de repente siento que me tocan las nalgas y me abrazan por detrás mientras estaba orinando, era Johanna, después de eso me dijo― Carlitos, sé que quieres aprovechar este momento, hace un rato vi cómo me mirabas los senos ¡Vamos aprovecha! José está dormido y yo estoy muy caliente.

― Parece que eres bruja, porque precisamente quiero eso ―dije emocionado.

Yo le di vuelta, la hice arrodillarse, y le dije ― ¡Quítame el pantalón, rápido! Quiero ponerte a chupar como un ternerito huérfano

Ella sonrío, y con una mirada de puta, me baja el pantalón y empieza a mamarme la verga. Primero me pasa la lengua de abajo hacia arriba y me dio un escalofrió en todo el cuerpo. Luego sigue chupando de una manera descomunal―se me olvidó mencionar que yo era soltero y ella sabía que no había tenido sexo en por lo menos un 3 meses―por eso chupaba con fuerza y succionaba. Era una perra en acción, una completa puta, queriéndome sacar toda la leche contenida

― Ya sé porque mi primo se enamoró de ti, eres una experta mamando verga, te encanta chupar verga ¿cierto? ―le dije y ella asentía con la cabeza mientras seguía en su faena. Yo jadeaba de placer y ella disfrutaba mi verga y las caras que yo hacía de tanto placer, así duró unos 5 minutos y le dije que no aguantaba más, que ya me iba a correr, ella siguió chupando con toda la pasión, y finalmente llegué en su boca. Fue un orgasmo tan rico que nunca lo olvidaré, ella se lo tragó y dijo ―Tienes una verga grande, y tu leche es más dulce que la de José, ahora te toca a ti Carlitos, quiero ver qué sabes hacer.

Esta es la primera parte de este relato, esperen la segunda parte donde contaré lo que pasó después de que ella me la mamó con una profesional, espero que hayan disfrutado mi relato. 

Carlos L

 

 

Johana

Johana es la esposa del primo de Carlos. Es una mujer muy bonita, estatura media, cabello negro, de piel blanca, ojos café claros, con los senos redonditos y no tan grandes, tiene una cadera más o menos ancha y unas nalgas paraditas muy lindas.

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