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La Página de Bedri
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Melocotonero

¿Qué es el melocotonero?

El melocotonero o duraznero (Prunus persica) es el nombre del árbol que produce el melocotón o durazno.

Origen

El melocotonero es originario de China, donde las referencias de su cultivo se remontan a 3.000 años. Fueron llevados probablemente a Persia a través de las rutas comerciales por las montañas, llegando a ser conocidos allí como fruta pérsica, de ahí el nombre persica, o melocotón. Estos términos llevaron a error de que los melocotoneros eran originarios de Persia.

Hacia el año 330 a.C., los melocotones llegaron a Grecia, y durante la Edad Media su cultivo se extendió por toda Europa.

En el siglo XIX se constata que el melocotonero aparece ya como cultivo en expansión. A principios del siglo XX se empiezan a seleccionar genotipos de melocotoneros a partir de poblaciones procedentes de semilla y se fijan por medio de injerto.

Clasificación científica

Reino: Plantae
División: Magnoliophyta
Clase: Magnoliopsida
Orden: Rosales
Familia: Rosaceae
Género: Prunus
Especie: P. persica

Nombre binomial
Prunus persica
L.

Morfología

Porte: pequeño árbol caducifolio que puede alcanzar 6 m de altura, aunque a veces no pasa de talla arbustiva, con la corteza lisa, cenicienta, que se desprende en láminas. Ramillas lisas, de color verde en el lado expuesto al sol.

Sistema radicular: muy ramificado y superficial, que no se mezcla con el otro pie cuando las plantaciones son densas (el antagonismo que se establece entre los sistemas radiculares de las plantas próximas es tan acentuado que induce a las raíces de cada planta a no invadir el terreno de la planta adyacente). La zona explorada por las raíces ocupa una superficie mayor que la zona de proyección de la copa: se considera que esta superficie es por lo menos el doble y en cualquier caso tanto mayor cuanto menor sea el contenido hídrico en el terreno.

Hojas: simples, lanceoladas, de 7.5-15 cm de longitud y 2-3.5 cm de anchura, largamente acuminadas, con el margen finamente aserrado. Haz verde brillante, lampiñas por ambas caras. Pecíolo de 1-1.5 cm de longitud, con 2-4 glándulas cerca del limbo.

Flores: por lo general solitarias, a veces en parejas, casi sentadas, de color rosa a rojo y 2-3.5 cm de diámetro.

El color de las hojas en otoño es un índice para la distinción de las variedades de pulpa amarilla de las de pulpa blanca: las hojas de las primeras se colorean de amarillo intenso o anaranjado claro, las de las segundas de amarillo claro.

Fruto: drupa de gran tamaño con una epidermis delgada, un mesocarpo carnoso y un endocarpo de hueso que contiene la semilla.

La aparición de huesos partidos es un carácter varietal.

Existen dos grupos según el tipo de fruto:

  • de carne blanda, con pulpa sin adherencia al endocarpo y destino en fresco.
  • de carne dura, con pulpa fuertemente adherida y destino fresco e industria.

Órganos fructíferos: ramos mixtos, chifonas y ramilletes de mayo. El de mayor importancia es el ramo mixto.

Los melocotones se producen en la madera de un año de yemas florales formadas en el anterior periodo vegetativo. Típicamente se forma en cada nudo una yema foliar flanqueada por dos yemas florales.

Polinización: especie autocompatible, quizás autógama, no alternante. La fecundación tiene lugar normalmente 24-48 horas después de la polinización.

Distribución geográfica

Es uno de los frutales más tecnificado y más difundido en todo el mundo. España es la segunda productora a nivel europeo con más de un millón de toneladas. El 20 % de la producción se destina a la industrialización: conserva de frutos en almíbar, zumos, elaboración de mermeladas y secado. y el 70 % a consumo en fresco, casi siempre para mercado interior. Sólo el 10 % se destina a la exportación.

El incremento de la producción en los últimos años se debe fundamentalmente a la renovación de las plantaciones, incremento de la superficie en regadío y mejora de las técnicas de cultivo.

Las tendencias de plantación del melocotonero se orientan al cultivo de variedades de maduración extratemprana en las zonas cálidas y al de variedades tardías de carne dura en las zonas menos cálidas.

Las preferencias de los consumidores por el color de la carne y el pretendido uso del fruto (mercado en fresco, enlatado, congelación o secado) contribuyen a la diversidad y al gran número de cultivares cultivados en todo el mundo.

Variedades

El melocotonero es la especie de mayor dinamismo varietal dentro de los frutales, cada año aparecen numerosas novedades en el mercado y la renovación varietal es de las más rápidas. Debido a las características climáticas y de producción, la distribución varietal no solo varia con el tiempo sino también en las áreas de cultivo.

La elección de variedades tiene enormes posibilidades y no resulta sencilla. Los principales criterios de elección son: requerimientos edafoclimáticos, destino de la fruta (consumo industrial o en fresco), demanda del mercado, época de producción, vocación y área de producción y calidad de la fruta.

Algunas de las variedades de melocotonero más cultivadas son:

De pulpa blanca.

Las variedades de pulpa esencialmente blanca, pueden ser con o sin vetas, con estrías verdosas y/o rojizas (según la variedad), total o parcialmente desprendida del hueso en el momento en que alcanza la madurez. La epidermis tiene vello y puede presentar una coloración muy diversa tanto en el porcentaje de epidermis que cubre, como en el tipo de color (rojo o rosado) así como en la intensidad del mismo.

Entre las variedades de pulpa blanca, están las de tipo europeo y las de tipo americano. Las de tipo europeo pueden ser de tipo clásico o tradicional (escasa coloración rosa o rojiza sobre fondo blanco verdoso, buena calidad gustativa y notable aroma); y de tipo moderno o actual (mejora en la coloración y pulpa más fibrosa y menos pastosa).

Las variedades de tipo americano destacan, por su vistosidad y gran atractivo: la mayoría tienen una coloración rosa intenso que suele cubrir prácticamente el fruto. Entre las variedades destacan: Mª Blanca, Large White, Iris Roso, Flordalgo, Mª Delicia, y Alexandra.

De pulpa amarilla

Bajo esta denominación se engloban los frutos que tienen piel con vello y cuya pulpa está total o parcialmente desprendida del hueso, hecho especialmente relevante en la madurez del fruto. Destacan las variedades: Springcrest, Spring Lady, Redhaven, SpringBelle, St. Isidoro, Royal Glory, Rich Lady, Redtop, Mª Rosa, Maycrest, Early Maycrest, Flavorcrest, Early grande, Queen Crest y Starcrest.

Tipo pavía

Son variedades de pulpa dura o semidura adherida al hueso. Hay múltiples variedades según sea su aprovechamiento (industria, consumo en fresco) y su origen, destacando: An-dross, Catherina, Everts, Suney, Tirrenia, Ionia, Mª Serena, Federica, Romea, Carson, Muntaingold, Babygold (5-6-7-9) y Sudanell.

En Sudamérica las cifras de producción se disparan y países como Brasil y Chile están incrementando sus volúmenes productivos de manera impresionante a partir de variedades como Springcrest, Elegant Lady, Early Sungrad o Flavor Top. En el sur de Europa y América, cada vez son más escasas las horas-frío necesarias para la mayoría de variedades californianas. Por este motivo existen problemas con variedades de melocotón como Springcrest y Maycrest, que no alcanzan la calidad deseada debido a esta falta de frío. Ello ha llevado a un interés creciente por la gama de variedades con bajas necesidades de frío como: Flordastar y Flordaking (en melocotón amarillo), Flordaglo (en melocotón blanco).

Cultivo

Los melocotoneros vegetan en una zona bastante restringida, ya que necesitan unas condiciones de frío que las zonas subtropicales no reunen y, al mismo tiempo, no son muy resistentes; en verano requieren temperaturas altas para que madure la cosecha. Algunas de las regiones productoras de melocotones más importantes son: California, Carolina del Sur, Colorado, Georgia y regiones limítrofes de Canadá; los países de la cuenca mediterránea y algunas zonas de China.

La mayoría de los árboles melocotoneros que se venden en los viveros son cultivares injertados. Son propensos a una enfermedad llamada enrrollamiento de la hoja, causada por un hongo (taphrina deformans), que normalmente no afecta directamente a la fruta aunque reduce la cosecha, ya que provoca una defoliación parcial del árbol. La fruta es muy susceptible a la gomosis, enfermedad fúngica causada por el monilinia fructicola.

Requerimientos edafoclimáticos

Se trata de un frutal de zona templada no muy resistente al frío, su área de cultivo se extiende entre 30 y 40º de latitud.

Las temperaturas mínimas invernales que el melocotonero puede soportar sin morir giran en torno a los -20ºC.

A -15ºC en la mayoría de las variedades se producen daños en las yemas de flor.

Requiere de 400 a 800 horas-frío y los nuevos cultivares requieren incluso menos. La falta de frío puede ser un problema si la elección varietal es errónea.

Las heladas tardías pueden afectarle, los órganos más sensibles a las mínimas térmicas son los óvulos, el pistilo y la semilla.

Es una especie ávida de luz y la requiere para conferirle calidad al fruto. Sin embargo el tronco y las ramas sufren con la excesiva insolación, por lo que habrá que encalar o realizar una poda adecuada.

Los diferentes patrones le permiten cualquier tipo de suelo, aunque prefiere suelos frescos, profundos, de pH moderado y arenosos. El melocotonero es muy sensible a la asfixia radicular; por ello hay que evitar los encharcamientos de agua y asegurar una profundidad de suelo no inferior a 1-1.50 m.

También es muy sensible al contenido en caliza activa, que no debe ser superior al 2-3%, ya que puede producir clorosis férrica.

Plantación

La exposición de esta especie debe ser a pleno sol y con buena ventilación. Esto permite que el aire frío circule durante las noches frías y mantiene la zona fresca en verano. La mejor época para plantarlos es a comienzos de invierno, de esta forma las raíces tienen tiempo de asentarse para poder alimentar la brotación primaveral.

La mejor época para realizar la plantación es el otoño, antes del frío invernal; excepto en las zonas de fuertes heladas invernales donde la plantación se retrasará hasta finales del invierno.

Si el melocotonero se injerta sobre patrón franco, el hoyo debe tener una profundidad de 80 x 80 cm, en el caso de emplear patrones clonales tendrán un mínimo de 60 x 60 cm, respetando las distancias entre los árboles según la fertilidad del suelo y la naturaleza específica del patrón.

Al proceder a la plantación se eliminarán todas las raíces heridas o magulladas a causa del arranque, y se despuntarán las muy largas, en tal caso podrá observarse si el árbol está en perfectas condiciones. En las plantaciones de secano, la impregnación de las raíces con una mezcla de tierra y fungicida favorecerá su prendimiento.

Se emplean diversos marcos en función del patrón utilizado y, dentro de éstos, según el vigor de la variedad. De forma aproximada si la formación es en vaso, se deja una distancia entre filas de 4-6 m, al igual que en la línea. En formaciones en Y o V se deja una distancia entre filas de 6 m y en la línea de 2.5-4 m.

Propagación

La propagación mediante semillas se emplea únicamente en la Mejora Genética, para crear nuevas variedades y para la propagación de algunos patrones.

La multiplicación de forma vegetativa, se realiza mayoritariamente mediante injerto de yema, (escudete) o en T, a yema velando sobre patrón obtenido a partir de semilla.

La propagación mediante estaquillado se emplea casi exclusivamente en algunos patrones, y de forma muy puntual en la propagación de variedades.

Patrones

Francos: llamados así en España e Italia, Tennesse Naturals o Indian Peach en Estados Unidos y Creole en México. Se obtienen de selecciones silvestres, son muy baratos, altamente compatibles, de gran longevidad y muy rústicos (se adaptan a todo tipo de suelos, excepto a los calizos o con problemas de encharcamientos). Confieren gran vigor a la variedad, por lo que no se pueden plantar a densidades muy elevadas.

Ciruelos: los ciruelos y los híbridos de ciruelo se adaptan mejor a los suelos húmedos y anegados, y se utilizan donde no son apropiados el melocotón y los híbridos interespecíficos del melocotón.

El ciruelo pollizo (P. insititia) presenta una gran capacidad de rebrote de sierpes que dificultan las labores. Damas 1869 se adapta a terrenos con problemas de asfixia y clorosis. Cuando estos problemas son moderados también se adaptan bien los patrones Brompton, GF 655-2 y San Julián A.

Los inconvenientes de los patrones de ciruelo son la incompatibilidad del injerto, la corta vida del árbol y la baja fertilidad.

Híbridos de melocotonero x almendro: (por ejemplo GF 556 y GF 677 en Francia) tienen una excelente adaptabilidad a los suelos alcalinos, húmedos o secos y son vigorosos en suelos de replantación.

Nemaguard y Nemared, son híbridos de P. persica y P. davidiana, se usan extensivamente en áreas donde los nemátodos formadores de agallas en la raíz son un problema.

Riego

Se les debe proporcionar un aporte constante de agua, que se incrementará un poco antes del momento de la cosecha. Las frutas con el mejor sabor se consiguen cuando los árboles son regados durante toda la estación. El riego por goteo es la forma ideal.

En terrenos secos, el riego además de asegurar una más regular y elevada productividad, favorece también la calidad de los frutos.

El consumo anual de agua de un melocotonero es de 60-100 hl, para una producción total de 20 kg de materia seca. Una hectárea de melocotoneros consume por lo tanto, durante el periodo vegetativo de 2.500 a 4000 m3 de agua.

La profundidad del terreno a la que debe afectar el riego es, aproximadamente, de 80 cm.

Los sistemas de riego tradicionales son el riego por surcos y a manta, con volúmenes que oscilan entre 10.000 y 12.000 m3/ha, fundamentales para obtener calibre, especialmente en variedades tardías.

El riego por aspersión se adapta a los diferentes tipos de terrenos y minimiza los efectos negativos de las altas temperaturas estivales, favoreciendo el crecimiento y distribución del sistema radicular, pero se incrementa la incidencia de enfermedades criptogámicas.

El riego por goteo es el sistema más empleado; las tuberías distribuidoras se colocan a una distancia aproximada entre 80-120 cm. La cantidad de agua puede variar entre 1-10 l/hora. Normalmente se emplean presiones de 1-1.5 atm. con un caudal de 2-3 l/hora.

Abonado

Los melocotoneros tienen unas altas necesidades de nutrientes, requiriendo más nitrógeno que la mayoría de los frutales. Se puede aplicar un abono NPK con regularidad y un aporte extra de estiercol de corral en otoño, tras la cosecha.

En el caso de contar con riego localizado, el abonado se realiza por fertirrigación y el fraccionamiento abarca desde marzo a octubre. Si el cultivo se realiza en secano o riego por inundación se realizan de dos a tres abonados: el primero en primavera y dos en verano.

Las dosis medias anuales son : 80-140 U.F. de nitrógeno, 50-60 U.F. de fósforo y 100-140 U.F. de potasio.

Deben realizarse análisis foliares para evaluar la evolución de los macro y micronutrientes más implicados en la productividad. En algunos casos se tiende aplicar sólo nitrógeno. Casi nunca se abonan los frutales con flores porque tienen bajas necesidades y las cantidades de nutrientes en el suelo suelen ser suficientes.

Frecuentemente se ve afectado por deficiencias de calcio y magnesio, y en menor medida de zinc y manganeso. La clorosis férrica es recurrente y la mejor solución es utilizar híbridos como patrón. La aplicación de correctores férricos vía foliar no resulta efectiva, aunque si han dado mejores resultados las emulsiones en salchicha que se inyectan; presentan mejor persistencia, no contaminan y tienen una distribución muy buena a través de la corriente transpiratoria.

Poda

La poda de formación se puede realizar en vaso o en palmeta, con bajas densidades de plantación (250-500 árboles/ha). La primera presenta la ventaja de que la técnica está ampliamente difundida entre los agricultores, pero requiere mucha mano de obra (es de difícil ejecución) y retrasa la entrada en producción.

La poda en palmeta resulta bastante adecuada a la especie, aunque también retrasa la entrada en producción, requiere bastante mano de obra y supone un coste adicional debido a las estructuras de apoyo.

Otros sistemas de poda, para densidades medias de plantación (500-1.000 árboles/ha), son la formación en Ypsilon y en palmeta libre. La primera confiere precocidad y una mayor producción inicial, pero requiere la poda en verde. La formación en palmeta libre supone un menor coste de poda con respecto a la palmeta en sentido estricto y una mayor producción inicial, pero también requiere de estructuras de apoyo y es necesaria la poda en verde.

El fusseto es un sistema que se emplea para altas densidades de plantación (1.000-5.000 árboles/ha), muy productivo y que requiere un mínimo mantenimiento, aunque a largo plazo resulta difícil de controlar. Los sistemas con poca intervención tienen un problema: la planta comienza a producir mucho antes, pero envejece prematuramente y si el marco es muy estrecho, al final el problema es mantenerlos en tamaño.

La solución sería ir a patrones enanizantes (ciruelo, cerezo), aplicar hormonas inhibidoras del crecimiento y controlar el riego y el abonado. En algunas zonas de cultivo se están combinando 2-3 podas en verde y una poda menos severa en invierno.

De tener que modificar la variedad cuando el árbol ha adquirido ya un cierto desarrollo, será mejor desmochar su ramaje hasta el cruce del tronco, con el objetivo de provocar una brotación nueva, que debe ser injertada el mismo año, siendo este el sistema más recomendable.

La poda de regeneración suele ser muy intensa con la eliminación del 60-75 % de los ramos mixtos y puede realizarse de forma mecánica.

Aclareo

El aclareo de frutos resulta imprescindible, debido a los efectos que tiene sobre el calibre y la precocidad. Se prefieren aclareos manuales, con el criterio de tamaño como determinante (cuando el fruto ha adquirido el tamaño de una avellana), dejando un fruto por cada 15-20 cm.

Si se omite el aclareo, se obtendrá un fruto de baja calidad, quedarán muy agotadas las reservas del árbol y puede incluso quedar comprometida la producción del año siguiente.

La mejor época para realizar el aclareo es después de la caída de pequeños frutos no fecundados y antes del endurecimiento del hueso, aproximadamente unos 30 días después de la plena floración. Un aclareo precoz favorece la formación de frutos de mayor tamaño, mientras que un aclareo demasiado tardío es muy poco eficaz.

Consejos para una buena cosecha

Si se dejan todos los frutos en el árbol, éstos serán de poco tamaño y carentes de dulzor y sabor. Los frutos se deben aclarar cuando han alcanzado los 2 cm de diámetro, normalmente dos meses después de la floración. Es importante también aportar riegos extras en condiciones secas.

Recolección

En la mayor parte de los cultivares, la fecha de recolección se determina por cambios en el color de fondo de la piel, de verde a amarillo. Se utiliza un guía de colores para determinar la madurez de cada cultivar.

Se recomienda medir la firmeza de fruta en cultivares en los que el color de fondo de la piel se encuentra enmascarado por el desarrollo completo de un color rojo antes de la maduración.

La madurez máxima corresponde a una firmeza de pulpa en la que la fruta se puede manejar sin daños por magullamiento, se mide con un penetrómetro que tenga una punta de 8 mm de diámetro. La susceptibilidad al magullamiento varía entre cultivares.

La recolección del melocotonero suele ser manual; en las partes altas de los árboles puede realizarse mediante escaleras o plataformas móviles (que avanzan entre líneas, y que transportan a los operarios y la fruta recolectada) para las formas en volumen o mediante carros colectores para las formas apoyadas.

En el caso de recolección mecanizada, las máquinas están constituidas esencialmente por dos partes: la cinta recogedora y el vibrador. Los vibradores actúan sobre el tronco, cuya principal ventaja reside en que las vibraciones transmitidas al árbol son independientes del resto de la máquina.

El vibrador y el colector actúan sobre los dos lados de la fila y se acoplan al árbol cubriendo todo el área de proyección de la copa.

Documentación

http://www.infoagro.com/
http://es.wikipedia.org/